JUEVES 6 de septiembre (HealthDay News/Dr. Tango) -- Un estudio reciente halla que la introducción de los cigarrillos con filtro bajos en alquitrán en los años cincuentas coincidió con un aumento constante en la incidencia de un tipo de cáncer de pulmón que alguna vez fue poco común y ahora es la forma más común de la enfermedad.
Hace varias décadas la forma más común de cáncer de pulmón era el carcinoma escamocelular. Sin embargo, según los autores del estudio, entre 1950 y 2007, el adenocarcinoma se convirtió en la malignidad pulmonar diagnosticada con mayor frecuencia a medida que la proporción del mercado de los cigarrillos con filtro aumentó dramáticamente de apenas 1 por ciento a casi el 100 por ciento.
El Dr. Gary M. Strauss, autor del estudio y director médico el programa de cáncer de pulmón del Centro Médico Tufts-New England de Boston, descubrió la relación aparente y la describió como "correlación de la evidencia". Presentó los hallazgos el miércoles en la Duodécima conferencia mundial sobre el cáncer de pulmón de Seúl, Corea del Sur.
Strauss y sus colegas sugieren que los efectos de los cigarrillos con filtro sobre los índices de adenocarcinoma se debe a la introducción de los conductos en los filtros de los cigarrillos, lo que facilita inhalar el humo. Estos conductos le permiten a los fumadores inhalan más y con mayor profundidad, lo que hace que los carcinógenos afecten más de los pasajes bronquiales y los pulmones.
"El aumento del adenocarcinoma coincide con cambios en los diseños y la composición de los cigarrillos, cosa que las tabacaleras señalaron que era más segura e introdujeron como respuesta a la creciente evidencia de que fumar causa otras formas de cáncer de pulmón", aseguró Strauss.
"Así, el punto es que las tabacaleras, por medio de la manera en la que han cambiado los cigarrillos con el tiempo y de cómo han engañado durante décadas al público sobre su seguridad, han creado una epidemia", agregó.
David Sutton, gerentes de asuntos con los medios de Philip Morris USA, aseguró que no podía comentar sobre los hallazgos. "No podemos comentar sobre un estudio que no hemos tenido la oportunidad de revisar. Fumar es adictivo y causa enfermedades graves. No existe ningún cigarrillo que sea seguro", dijo.
Para explicar el aumento dramático del adenocarcinoma, Strauss y su equipo de investigadores estadounidenses primero analizó los datos sobre los índices de cáncer que se habían recolectado entre 1975 y 2003 a través del programa "Surveillance Epidemiology and End Results" (SEER o vigilancia de la epidemiología y de los resultados finales) del National Cancer Institute.
Los autores del estudio se enfocaron en información sobre más de 307,000 fumadores blancos y negros, el 75 por ciento de los cuales tenían 60 años más en el momento del diagnóstico. Se enfocaron en seis periodos definidos, entre 1975 y 1979, entre 1980 y 1984, entre 1985 y 1989, entre 1990 y 1994, entre 1995 y 1999, y entre 2000 y 2003.
Se compararon las estadísticas sobre los cuatro tipos principales de cáncer de pulmón, adenocarcinoma, carcinoma escamocelular, carcinoma macrocítico y carcinoma microcítico, para revelar qué tan común había sido la enfermedad en esos seis periodos de tiempo. Los primeros tres tipos de cáncer caen dentro de la categoría de "no microcíticos" que da cuenta de un 85 por ciento de todos los cánceres de pulmón de los EE.UU., según la American Cancer Society.
Las cifras del SEER señalaron que para los años entre 2000 y 2003, el 47 por ciento de todos los cánceres de pulmón eran adenocarcinoma, observaron Strauss y su equipo.
Aunque las cifras de la American Cancer Society actualmente ubican el adenocarcinoma en el 40 por ciento de todos los casos, la información de la ACS y del SEER confirma que el adenocarcinoma es, de lejos, la forma más prevalente de cáncer de pulmón de la actualidad, independientemente de la raza, la edad y el sexo.
En 1950, el adenocarcinoma constituía apenas el 5 por ciento de todos los casos de cáncer de pulmón y el diagnóstico de la enfermedad típicamente no se consideraba causado por fumar cigarrillos. A mediados del siglo 20, la mayoría de los casos de cáncer de pulmón eran escamocelulares, según los investigadores.
Aún así, la información del SEER ilustra un aumento dramático en los casos de adenocarcinoma a partir del final de los años sesenta. Y desde el periodo de 1975 a 1979 al de 1995 a 1999, los casos de adenocarcinoma aumentaron un sorprendente 62 por ciento. El adenocarcinoma superó al carcinoma escamocelular como la forma más común de cáncer de pulmón entre las mujeres en el periodo de 1975 a 1979 y entre los hombres en el periodo de 1980 a 1984.
Debido a que la base de datos del SEER no recolectó información sobre la demografía del tabaquismo, los investigadores aseguraron que posteriormente buscaron en una gran cantidad de información adicional sobre 50 años de producción de cigarrillos en los EE.UU. y hábitos del consumidor en buscar de una explicación subyacente.
Strauss y sus colegas aseguran que hallaron que la adopción a gran escala de los cigarrillos con filtro bajos en alquitrán se acercó mucho al aumento en los índices de adenocarcinoma.
Los cigarrillos con filtro pasaron de uno por ciento en el mercado de los EE.UU. en 1950 a 64 por ciento para 1964. Para 1986, los cigarrillos con filtro habían capturado el 95 por ciento del mercado y para 2007 la cifra era de 98 por ciento.
"Y aunque el adenocarcinoma del pulmón siempre ha existido, ahora es la forma más común de cáncer de pulmón y quizá la segunda forma más común de muerte por cáncer", aseguró Strauss. "Quizá más personas mueran específicamente de adenocarcinoma relacionado con el tabaquismo hoy que las que mueren de cáncer de colon".
"Entonces, aunque no es nada realmente nuevo, lo estamos reuniendo", dijo. Y lo que surge, agregó, es la historia de una industria tabacalera que hace años activamente cambió sus productos para minimizar su relación conocida con ciertos tipos de cáncer, lo que suscitó toda una nueva amenaza carcinogénica y un cáncer asesino aún peor.
"Mi esperanza ahora es que se reconozca que la industria tabacalera en realidad generó esta epidemia mortal de adenocarcinoma relacionado con el tabaquismo durante décadas de engaño", sentenció Strauss.
Los resultados de varios estudios internacionales también se presentaron esta semana en la conferencia de Corea del Sur, entre ellos un hallazgo noruego de que los cigarrillos liados a manos son más carcinogénicos que los previamente empacados, lo que conduce a un mayor riesgo de cáncer de pulmón.
Otro estudio de Japón mostró que las personas que tenían antecedentes familiares de cáncer de pulmón eran más propensas a desarrollar la enfermedad, en particular la escamocelular, posteriormente en la vida. Sin embargo, los antecedentes generales familiares de cáncer no se relacionaron con mayor riesgo de cáncer de pulmón.
Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
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