Por una tierra que nos alimente

Una tierra verdaderamente fértil es rica en minerales y microorganismos, favorece la biodiversidad y produce alimentos nutritivos. Pero, hoy, sólo el cultivo ecológico lo garantiza.

La calidad de los alimentos ha empeorado, ha aumentado la incidencia de enfermedades degenerativas y crónicas, incluso a edades tempranas como entre todos los que han nacido en los años 60 y 70. Las deficiencias de minerales y vitaminas, junto con la ingesta de agentes tóxicos como residuos de plaguicidas y metales pesados, pueden estar relacionados con estos datos preocupantes. Por ejemplo, hoy el 86% de las jóvenes consumen menos de la cantidad diaria recomendada de hierro.

Revista Integral